Ataques israelíes intensos sacuden la costa siria y causan víctimas y incendios.

Los aviones de ocupación israelí llevaron a cabo una serie de ataques aéreos intensos e inesperados el viernes 30 de mayo de 2025, dirigidos a instalaciones militares y áreas cercanas a zonas civiles en la costa siria, específicamente en las afueras de Latakia y Tartus. Esto resultó en la muerte de un civil y tres heridos en la aldea de Zama en las afueras de Jableh, además de graves pérdidas materiales y grandes incendios en varios puntos atacados.

Fuentes oficiales sirias confirmaron que los ataques israelíes se dirigieron a:

* La aldea de Zama en las afueras de Jableh, donde hubo víctimas civiles

* La aldea de Borge Islam en las afueras del sur de Latakia

* Alrededores del puerto de Tartus

* La Brigada 107 en Zama

* El cuartel Shamia cerca de Ras Shamra en las afueras de Latakia

* La Brigada 56 en las afueras de Tartus

* El cuartel Balata cerca de las viviendas de cemento

* Áreas cercanas a las fábricas de Wahib

* El puerto blanco en la ciudad de Latakia

También se atacaron depósitos de misiles del tipo "tierra-mar", que Tel Aviv afirmó representaban una amenaza directa para la libertad de navegación marítima internacional e israelí en el este del Mediterráneo.

El ejército israelí anunció oficialmente que los ataques también incluyeron documentos y misiles tierra-aire, afirmando que sus operaciones tienen como objetivo "eliminar cualquier amenaza potencial para Israel y sus ciudadanos".

Es notable que el canal 12 israelí y fuentes cercanas a la institución de seguridad israelí informaron que los combatientes extranjeros que suelen estar estacionados en estos lugares evacuaron antes de los ataques en un corto período de tiempo, lo que suscitó sospechas sobre posibles filtraciones de inteligencia o coordinación previa, e incluso mensajes cifrados detrás de estos ataques en un momento preciso.

Medios de comunicación informaron observaciones desde el terreno que confirmaron un intenso vuelo de aeronaves hostiles en las áreas de Tartus, Latakia, Damasco y Homs, simultáneo a explosiones masivas audibles claramente en diversas ciudades costeras. El esparcimiento de vidrios debido a las explosiones causó lesiones entre civiles en algunas áreas de Tartus.

Aunque estos son los primeros ataques en aproximadamente un mes, se producen en medio de filtraciones sobre negociaciones indirectas que Damasco está llevando a cabo con Tel Aviv a través de mediación internacional para contener la escalada, lo que ha llevado a algunos observadores a considerar que el momento de los ataques tiene implicaciones políticas y de seguridad sensibles que van más allá del aspecto militar directo, especialmente con informes que indican que la mayoría de los sitios atacados estaban vacíos de personal y armas.

La reacción del público local al evento se caracterizó por la incertidumbre y la preocupación, ya que algunos ven estos ataques como el preludio de una nueva etapa de presión militar y política sobre Siria, mientras que otros advierten sobre la posibilidad de repetir los ataques en los próximos días si no se restablece el equilibrio en la región.

Hasta ahora, no ha habido una respuesta oficial directa por parte del liderazgo sirio sobre la naturaleza de una posible respuesta o la postura política frente a los ataques, mientras tanto, tanto la comunidad local como internacional están a la espera de los desarrollos posteriores al bombardeo, especialmente con la implicación de Israel en varios frentes activos en la región y la posibilidad de ampliar sus objetivos dentro de territorio sirio en