En medio de la escalada del conflicto palestino-israelí, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, generó controversia con sus declaraciones sobre la propuesta del presidente francés, Emmanuel Macron, de reconocer el Estado palestino.
Netanyahu calificó esta propuesta como un "grave error", insistiendo en que Macron promueve la idea de un "Estado palestino en el corazón de nuestra tierra", que él cree busca "destruir el Estado de Israel".
Estas declaraciones llegan después de que Macron anunciara que Francia podría reconocer el Estado palestino en junio, en un evento conjunto con Arabia Saudita en Nueva York, con la esperanza de estimular el reconocimiento israelí por parte de algunos países árabes.
Mientras tanto, la Media Luna Roja Palestina sufrió un nuevo golpe después de que el Comité Internacional de la Cruz Roja anunciara que Israel arrestó a uno de sus paramédicos, Asad al-Nusaira, quien había perdido contacto después del ataque que sufrió con su equipo en Rafah, al sur de la Franja de Gaza en marzo pasado, que resultó en la muerte de 15 paramédicos.
El ataque, descrito por las Naciones Unidas como "horrendo", apuntó a los equipos de ambulancias que intentaban ayudar a los heridos, lo que ha generado demandas palestinas de una investigación internacional sobre el incidente.
En el ámbito militar, las Brigadas Al-Qassam, el ala militar de Hamas, anunciaron un ataque exitoso contra una fuerza especial israelí en Rafah, que resultó en bajas y heridos en las filas de la fuerza infiltrada.
Por otro lado, las fuerzas de ocupación israelíes emitieron advertencias de evacuación para los residentes en la zona de Jan Yunis, advirtiendo de un inminente ataque.
El portavoz del ejército israelí declaró que cualquier área desde la que se lancen cohetes será fuertemente atacada, señalando que Hamas y otras facciones son responsables de la crisis humanitaria causada por los desplazamientos.
En otro desarrollo, informes en el terreno indican que un ataque aéreo israelí golpeó el Hospital Al-Muadami en Gaza, destruyendo el edificio casi por completo.
El ataque, dirigido al departamento de cirugía y la unidad de cuidados intensivos, causó daños significativos en la principal instalación médica de la ciudad, que albergaba a cientos de pacientes y heridos. Con los eventos en aumento, el Ministerio de Salud palestino informó que 22 de los 36 hospitales en Gaza están operando parcialmente, y solicitó a la comunidad internacional proteger el sector de la salud ante las violaciones continuas.
En medio de estos eventos, la región experimenta un caos con un aumento de desplazados que no encuentran refugio, con escenas desgarradoras de familias vagando por las calles de Gaza, algunas refugiadas en tiendas de campaña, mientras los aviones israelíes bombardean sobre sus cabezas.
Naila Emad, madre de seis hijos, describió su sufrimiento como peor que la muerte misma, diciendo: "Prefiero que todos muramos juntos en lugar de vivir en estas duras condiciones".