El enviado de la ONU a Siria advierte sobre las repercusiones de los ataques israelíes y llama a detenerlos de inmediato.

El enviado especial de las Naciones Unidas a Siria, Geir Pedersen, expresó su "profunda preocupación por los actos de violencia inaceptables" que está experimentando Siria, condenando los recientes ataques israelíes en territorio sirio y exigiendo su cese inmediato.
Pedersen advirtió que la continuación de estas escaladas amenaza la frágil estabilidad del país y aumenta la intensidad de las tensiones sociales.
Esto se mencionó en un comunicado oficial emitido la noche del miércoles 30 de abril, en el que Pedersen confirmó que está monitoreando los desarrollos, especialmente en los alrededores de la capital Damasco y la ciudad de Homs, donde se han reportado víctimas entre civiles y fuerzas de seguridad.
Pedersen señaló que estos ataques, incluidos los ataques aéreos israelíes, "socavan los esfuerzos de calma", instando a tomar medidas urgentes para proteger a los civiles y evitar que la crisis empeore.
El enviado de la ONU también enfatizó la necesidad de una "rendición de cuentas justa" para aquellos que se demuestre que están involucrados en actos de violencia o incitación contra civiles, reafirmando la importancia de respetar la soberanía y la integridad territorial de Siria.
Además, reiteró su apoyo a los esfuerzos para reanudar un diálogo serio entre todas las partes sirias, basado en la confianza y la participación integral para lograr la estabilidad.