El Sheij Al-Hijri acusa a Damasco de imponer la declaración espiritual drusa presidencial bajo presiones externas

El Sheij Hikmat Al-Hijri, la autoridad espiritual suprema de la secta musulmana unificada drusa en Suweida, reveló que la reciente declaración emitida por la presidencia espiritual, que llamaba a entregar las armas y daba la bienvenida a la entrada de las fuerzas gubernamentales en la provincia, "fue impuesta por Damasco bajo presiones externas".
Al-Hijri explicó en un discurso grabado que la declaración se emitió "para detener el derramamiento de sangre de los hijos de la montaña", pero fue recibida _según sus palabras_ con "violación del compromiso y continuación de los bombardeos indiscriminados contra civiles inocentes".
Al dirigirse a los sirios, Al-Hijri dijo: "Hoy estamos ante dos opciones: o ser un solo pueblo que rechaza la humillación y la degradación, o aceptar décadas de humillación para nosotros y nuestros hijos". Y agregó: "Estamos siendo sometidos a una guerra de exterminio total, y todos nosotros _hombres y mujeres, jóvenes y mayores_ debemos tomar una posición de honor que la historia registre".
Hizo hincapié en que los eventos en Suweida "van más allá de las disputas locales", instando a los hijos de la secta drusa y a los sirios en general a "enfrentar esta campaña bárbara con todos los medios disponibles", en una señal que sugiere la necesidad de una intervención externa para proteger la región.
La declaración de Al-Hijri llega horas después de la emisión de una declaración oficial de la presidencia espiritual que llamaba a un alto el fuego y a cooperar con las fuerzas gubernamentales, para luego declarar que estas posturas "no reflejan una voluntad libre", sino que surgieron "bajo presión".