La partida del director argelino Mohamed Lakhdar Hamina... poseedor de la Palma de Oro y creador de "Cronología de los años de fuego".

La muerte ha llevado al director de cine argelino Mohamed Lakhdar Hamina, el único árabe que ha ganado la Palma de Oro en el Festival de Cine de Cannes, falleciendo el viernes 23 de mayo a la edad de 95 años en su casa en la capital argelina, según anunció su familia en un comunicado oficial.
Sus hijos lamentaron la pérdida describiéndolo como alguien que dejó "un legado cinematográfico invaluable y una visión artística excepcional que dejó su huella en la historia del cine", destacando que durante cuatro décadas pudo ser "un puente cultural entre el sur y el oeste, y una voz para el tercer mundo y su patria, Argelia".
Se recuerda que el difunto fue uno de los directores árabes más destacados que gozó de reconocimiento internacional, compitiendo oficialmente en el Festival de Cannes en cuatro ocasiones, donde obtuvo dos grandes premios: la Palma de Oro por su icónica película "Cronología de los años de fuego" producida en 1975, y el premio a la Mejor Ópera Prima por su trabajo "El viento de Aurès" en 1966.
En una reacción oficial, el presidente argelino Abdelmadjid Tebboune lo lamentó considerándolo "un gigante del cine mundial", señalando que sus películas "revelaron el sufrimiento del pueblo argelino durante la era colonial al mundo entero". El presidente agregó en su discurso: "Antes de ser un creador cinematográfico, fue un luchador valiente que a través de su lente contribuyó a dar a conocer la lucha de nuestro pueblo".
El Festival de Cine de Cannes honró al difunto este año con la proyección de una nueva versión de su famosa película "Cronología de los años de fuego" como parte del programa "Cannes Classics", considerado un homenaje a su carrera que impactó en el cine mundial, según la Agencia de Prensa Francesa.
El difunto nació el 26 de febrero de 1934 en la ciudad de M'Sila en una familia campesina sencilla. Después de estudiar agricultura, viajó a Francia donde conoció a su esposa en la ciudad de Antibes. Se unió a la resistencia argelina en Túnez en 1958 después de que su padre fuera torturado y asesinado por el ejército francés.
Hamina comenzó su carrera cinematográfica con una formación práctica en un canal de televisión tunecino, dirigiendo su primera película documental "Pero en un día de noviembre" en 1964. A lo largo de cinco décadas, presentó obras importantes como "Hassan Terro" y "Diciembre" y "Vientos de arena", culminando en su última película "La última imagen".
Su familia lo describió en el comunicado de despedida como "uno de los últimos gigantes del cine épico que combinó la fuerza y la poesía, y que dejó una huella imborrable en la memoria del cine mundial", asegurando que sus obras seguirán siendo testigos de la grandeza de su creatividad.