La Defensa Civil Siria continúa sus esfuerzos para extinguir los incendios en la montaña de Turkmenistán en el campo de Latakia.
El equipo de defensa civil sirio (Cascos Blancos) continúa apagando incendios en los bosques de Jabal Turkman en el noreste de Latakia por cuarto día consecutivo, logrando controlar varios focos, pero enfrentando dificultades con dos focos principales y otros pequeños dispersos.
La organización de defensa civil informó en un comunicado a través de "Telegram" el sábado 10 de mayo, que más de 30 hectáreas de tierras forestales han sido afectadas por el fuego, asegurando que "hasta ahora no se han registrado daños en viviendas".
El comunicado señaló que la extinción enfrenta grandes dificultades debido a la topografía accidentada, la presencia de acantilados rocosos pronunciados, la lejanía de las fuentes de agua, el aumento de la velocidad del viento y las altas temperaturas. También advirtió que "la presencia de restos de guerra sin detonar en la zona representa un peligro real para la vida de los bomberos y obstaculiza sus movimientos".
Desde el lugar del incendio en la zona de Rabiya, el jefe de la organización, Munir Mustafa, explicó que se ha establecido una sala de operaciones conjunta en coordinación con el Ministerio de Emergencias y Desastres para reforzar los esfuerzos de extinción, con refuerzos llegados de equipos de defensa civil en las provincias de Idlib, Alepo y Hama, especialmente ante la previsión de un aumento de la temperatura y la velocidad del viento el domingo 11 de mayo.
Por su parte, el Ministerio de Emergencias y Desastres anunció que "se ha controlado más del 60% del área del incendio", considerando que "el movimiento del viento será un factor decisivo en el éxito de los esfuerzos de extinción en las próximas horas".
A pesar de los desafíos, la defensa civil afirmó que sus equipos "están haciendo todo lo posible para aislar las áreas afectadas y establecer cortafuegos para evitar la propagación del fuego a áreas habitadas o más zonas forestales".
Cabe mencionar que la región experimentó incendios similares en marzo pasado, que fueron controlados sin pérdidas humanas. Sin embargo, los residentes de la zona expresaron su preocupación por la expansión del incendio actual, especialmente debido a la escasez de maquinaria pesada capaz de trabajar en terrenos escarpados.
Las imágenes del incendio muestran a los equipos de defensa civil trabajando entre llamas y densas columnas de humo, donde un bombero describió la escena diciendo: "No buscamos gloria, sino un momento de salvación... una chispa de esperanza y vida para estos árboles".
La causa de los incendios aún no ha sido oficialmente anunciada, mientras continúan los esfuerzos para contener los focos restantes antes de que empeoren las condiciones climáticas.
