Informe: Los ataques estadounidenses e israelíes obstaculizan el programa nuclear iraní y destruyen instalaciones vitales

Expertos en el campo nuclear revelaron que los recientes ataques estadounidenses a las instalaciones mineras iraníes han causado graves daños a la capacidad de Teherán para fabricar el núcleo de la bomba nuclear a largo plazo, confirmando que la reconstrucción de estos sitios podría llevar años.
El periódico estadounidense "The New York Times" citó a analistas que afirmaron que los ataques estadounidenses e israelíes han sido un gran obstáculo para los esfuerzos de Irán en la fabricación de armas nucleares, a pesar de que su reserva de uranio enriquecido permanece intacta.
En este sentido, David Albright, director del Instituto de Ciencia y Seguridad Internacional en Washington, declaró: "Deben reconstruirlo", refiriéndose a las instalaciones destruidas.
Los ataques apuntaron a una instalación en Isfahán que albergaba equipos que Irán planeaba utilizar para convertir el gas de uranio en metal, un proceso conocido como "enriquecimiento", siendo un paso crucial en la fabricación del núcleo explosivo de la bomba nuclear.
El Secretario de Estado de EE. UU., Mike Pompeo, afirmó que la destrucción de las instalaciones de conversión (enriquecimiento) ha retrocedido a Irán años, no solo meses como indicaban informes de inteligencia preliminares. Pompeo dijo: "No puedes fabricar un arma nuclear sin una instalación de conversión", añadiendo: "Ni siquiera podemos ubicarla en el mapa, donde solía estar. Todo está oscuro. Se ha borrado por completo".
Esta coincidencia de opiniones entre expertos sobre el impacto de los ataques en el programa de enriquecimiento iraní es poco común, dado el habitual desacuerdo en las evaluaciones de inteligencia sobre tales asuntos.
Sin embargo, algunos analistas cuestionan la efectividad de los ataques, señalando que Irán estaba llevando a cabo operaciones de enriquecimiento en otros sitios, como Natanz, un centro de investigación desmantelado en 2004. Sin embargo, estos sitios se describen como pequeños o incompletos en comparación con el complejo industrial grande en Isfahán.
Por su parte, el Ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Abbas Araghchi, admitió que los daños sufridos por las instalaciones nucleares después de 12 días de guerra con Israel son "significativos", mientras que el presidente de EE. UU., Donald Trump, afirmó que el programa nuclear iraní ha retrocedido "décadas".
Recientemente, se han producido enfrentamientos sin precedentes entre Israel e Irán, con la intervención estadounidense a través de ataques a tres instalaciones nucleares en Fordo, Natanz e Isfahán, a los que Teherán respondió atacando bases militares en Qatar e Irak sin causar víctimas. Todo culminó con la sorpresiva declaración de alto el fuego por parte de Trump.