Líderes del G7 reafirman su apoyo a Israel y llaman a reducir la escalada en Oriente Medio
En una declaración conjunta emitida el martes 17 de junio, los líderes del Grupo de los Siete países industrializados (G7) expresaron su apoyo unánime a Israel y advirtieron sobre el empeoramiento de la escalada militar en la región, especialmente después del reciente intercambio de ataques entre Israel e Irán.
La declaración decía: "Reafirmamos el derecho de Israel a defenderse a sí mismo y renovamos nuestro apoyo a su seguridad", expresando su preocupación por el deterioro de la situación. También criticaron duramente a Irán, calificándolo como "la principal fuente de inestabilidad y terrorismo en la región", afirmando que "Teherán no debe poseer armas nucleares bajo ninguna circunstancia".
La declaración llamó a resolver "la crisis iraní" y a "reducir de manera más amplia la escalada en Oriente Medio, incluido un alto el fuego en Gaza", en referencia a la continua crisis humanitaria en el sector.
La Casa Blanca anunció que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, no asistiría al segundo día de la cumbre, "debido a lo que está sucediendo en Oriente Medio", según lo declarado por la portavoz oficial Caroline Levitt en la plataforma "X".
El G7 incluye a Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Francia, Alemania, Italia y Japón, además de la participación de líderes de otros países como la Unión Europea, Australia, Brasil, México, Ucrania y Corea del Sur.
La cumbre de este año se centró en desafíos económicos y geopolíticos, incluidas las disputas sobre las políticas arancelarias adoptadas por Trump, que han suscitado preocupaciones sobre su impacto en la economía mundial.
Los líderes también discutieron el tema del apoyo a Ucrania y las relaciones con Rusia, donde Trump expresó reservas sobre imponer sanciones adicionales a Moscú, diciendo que la expulsión de Rusia del grupo (anteriormente G8) en 2014 "fue un error".
Por otro lado, China adoptó una postura diferente, condenando el ataque israelí a Irán y anunciando sus esfuerzos para calmar la situación. El ministro de Relaciones Exteriores chino, Wang Yi, dijo que su país está dispuesto a desempeñar un "papel constructivo" en la reducción de la escalada, después de mantener conversaciones con las partes iraní e israelí.
