El ex gran muftí de Siria, Ahmed Badr al-Din Hassoun, ha sido arrestado en el Aeropuerto Internacional de Damasco.

Las fuerzas de seguridad detuvieron ayer miércoles 26 de marzo al ex gran muftí de la República Árabe Siria, el jeque Ahmed Badr al-Din Hassoun, en el Aeropuerto Internacional de Damasco, mientras intentaba salir del país hacia Jordania para someterse a una operación quirúrgica en la capital, Amán.
Según informó el periódico local "Al Watan", Hassoun había obtenido previamente la autorización de las autoridades sirias para viajar a Jordania para recibir tratamiento, habiéndose asignado dos vehículos oficiales para acompañarlo al aeropuerto junto con su esposa e hijos, además de reservarle la sala VIP para esperar el despegue del avión.
Minutos después de su llegada, agentes de seguridad entraron en la sala y lo arrestaron, llevándoselo a un lugar desconocido, sin afectar a su familia que permaneció en el aeropuerto.
El "Observatorio Sirio de Derechos Humanos" informó que la Dirección de Migración y Pasaportes del aeropuerto selló el pasaporte del jeque Hassoun antes de ser llevado por las fuerzas de seguridad.
Activistas en redes sociales han compartido una imagen que muestra al jeque Hassoun con los ojos vendados durante su arresto.
Hasta el momento, no se ha emitido ningún comunicado oficial que aclare las razones de la detención o el paradero de Hassoun, mientras circulan informes sobre investigaciones en curso con él sobre motivos no declarados.
Cabe destacar que el jeque Ahmed Hassoun ocupó anteriormente el cargo de muftí de Siria y era conocido por su fuerte apoyo al régimen sirio anterior, lo que lo hizo objeto de amplias críticas, especialmente durante los eventos de los últimos años en el país.
El pasado 17 de febrero, la casa de Hassoun en el barrio de Al-Furqan en Alepo fue escenario de protestas después de la aparición de un video que lo atacaba y lo calificaba como el "muftí de los barriles", lo que llevó a que jóvenes se reunieran frente a su casa y algunos la invadieran, lo que requirió la intervención de las fuerzas de seguridad para dispersar a los manifestantes y proteger al ex gran muftí.