Después del ataque a manifestantes frente al Consejo del Pueblo.. La "Red Siria" pide que se responsabilice a los responsables

Tras una gran controversia generada por un video de la capital Damasco, que muestra a un grupo de jóvenes armados con palos y porras agrediendo a manifestantes frente al parlamento sirio que portaban pancartas con la inscripción "La sangre de un sirio en manos de otro sirio es sagrada", frase derivada de una fatwa emitida por el muftí de la república tras los eventos de marzo y las masacres ocurridas en ese momento, hoy la "Red Siria de Derechos Humanos" insta al gobierno sirio a perseguir a los responsables del ataque a los activistas civiles el pasado viernes.
La red, en un comunicado, afirmó que la protesta se llevó a cabo en rechazo a la escalada de violencia en la provincia de Suwayda y en demanda de protección para los civiles y fortalecimiento de la paz civil, y fue testigo de agresiones físicas y verbales violentas contra los participantes por parte de individuos cuya identidad no ha sido determinada.
Según lo documentado por la red a través de testimonios directos de participantes y testigos presenciales, varios civiles, algunos de ellos portando palos de madera, atacaron a los manifestantes pacíficos minutos después de finalizada la protesta, golpeándolos y insultándolos, lo que resultó en lesiones físicas y un estado de gran temor entre los participantes, incluidas mujeres y destacados activistas de la sociedad civil.
Según la red, a pesar de que el incidente ocurrió en un lugar vital de la capital, las fuerzas de seguridad o la policía cercana al lugar no intervinieron para proteger a los manifestantes o detener a los agresores. Tampoco se lanzó ninguna campaña para perseguir a los criminales o arrestarlos, a pesar de la claridad de las caras de algunos de ellos en los videos que se compartieron en las redes sociales.
La red enfatizó que la protección de la protesta civil pacífica es un compromiso legal, ético y constitucional, y debe ser un elemento fundamental en la construcción de instituciones basadas en el estado de derecho y la garantía de derechos, de acuerdo con las aspiraciones de los sirios después de años de represión y violaciones.