Bombardeos aéreos y de artillería en las afueras de Yabla, causando pánico entre los civiles.

La intensidad de las operaciones militares en el campo de Jabalá, en la provincia de Latakia, ha aumentado, donde los helicópteros llevaron a cabo ataques aéreos que apuntaron a Beit Ana desde el lado de la aldea de Maarin, al mismo tiempo que un bombardeo alcanzó la aldea de Dweir B'abda, creando un estado de pánico entre los civiles.

Según informó el "Observatorio Sirio de Derechos Humanos", "el sonido de las explosiones sacudió la zona, sin que hasta el momento se tengan informaciones precisas sobre el alcance de los daños humanos y materiales".

Este recrudecimiento se produce en medio de una creciente tensión en la región, lo que genera temores sobre la expansión de las operaciones militares en las próximas horas.

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos señaló que "la localidad de Al-Daliyah en el campo de Jabalá, en la provincia de Latakia, y la aldea de Beit Ana, que le pertenece, fueron escenario de una campaña de seguridad llevada a cabo por las fuerzas de seguridad interna, acompañada de bombardeos, mientras continúan los enfrentamientos con armas automáticas entre las fuerzas de seguridad y grupos armados locales de la zona, sin que se tengan informaciones sobre las pérdidas humanas".

Esta campaña se produce después de que un grupo armado local fuera atacado por una patrulla de seguridad interna en la aldea de Beit Ana, mientras se escuchaban explosiones causadas por 3 proyectiles en los alrededores de la zona, y se cortaba la red de comunicaciones.

Al mismo tiempo, unidades militares de las fuerzas de seguridad interna entraron en la zona, con alrededor de 20 vehículos, algunos equipados con ametralladoras "Dushka" y vehículos blindados, con información sobre la llegada de refuerzos adicionales, en el marco de una campaña de seguridad dirigida a personas buscadas.

Según el Observatorio, los habitantes de la zona se negaron a entregar a cualquier persona sin mostrar una orden de registro o un documento oficial, lo que provocó enfrentamientos con las fuerzas de seguridad, que se intensificaron con disparos al aire para dispersar las multitudes. Uno de los sospechosos de tráfico de armas fue arrestado.